martes, 16 de junio de 2009

Modo narrativo: juego de autores y narradores

El artificio narrativo en que se sustenta la construcción del Quijote es extraordinariamente complejo.
En los primeros capítulos, del 1 al 8, el Quijote es ya, en palabras de Torrente Ballester, un cuento de un cuento, pues el "autor"aparece como un investigador que recoge datos sobre la historia de don Quijote en autores y archivos de La Mancha. Ya en I, 8 se descubre la existencia de dos "autores", en la referencia al "segundo autor desta obra".
El artificio narrativo se complica en el capítulo 9: Cervantes ensaya el procedimiento del manuscrito encontrado, inventa un historiador moro al que atribuye la autoría de la obra, un traductor que la vierte al castellano y se sitúa él mismo- mejor dicho, su figura también ficcionalizada- como "segundo autor", que mediante un narrador omnisciente en grado sumo, entrega dicha historia a los lectores.
La técnica del manuscrito encontrado, además de ser parodia del mismo recurso empleado en los libros de caballerías- su autoría era atribuida a encantadores de la antigüedad- y de dar mayor ilusión de verdad a los hechos de don Quijote, es manejada como procedimiento del que se derivan hallazgos importantes:
a) El historiador moro Cide Hamete Benengeli es el primer "autor" del Quijote.
b) El morisco aljamiado es su primer traductor (del árabe al castellano).
c) Cervantes, ficcionalizado también en la obra, resulta ser así el segundo autor, el cual, por medio del narrador, entrega a los lectores una historia acerca de la cual puede comentar y opinar cuanto le parezca oportuno.
d) Los primeros lectores también quedan ficcionalizados en la segunda parte, pues algunos personajes de ella ya han leído la primera parte.
e) La omniscencia y la libertad del narrador son inmensas, porque conoce de antemano toda la historia por la lectura de su traducción.

En este juego de autores y narradores, en el que se combinan la historia de Cide Hamete, la traducción del morisco, los comentarios del autor implícito y las intervenciones del narrador, además del punto de vista de este o aquel personaje, la inmensa libertad creadora preside todo el proceso y está indisolublemente ligada al complejo perspectivismo múltiple: ¿quién garantiza la verdad de lo escrito por el historiador moro, siendo él verdadero como historiador y mentiroso como árabe? ¿Quién garantiza la fidelidad de la traducción del morisco?
El juego de autor moro, traductor morisco y narrador cristiano hace posible cualquier perspectiva imprevista. Por eso abundan los comentarios que el "autor segundo" prodiga sobre Cide Hamete, las anotaciones del traductor, las advertencias de Cide Hamete e incluso las quejas que el autor moro expresa acerca de la traducción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario